La pasada madrugada empezó oficialmente el invierno y he pensado que es una buena ocasión para hablaros un poco de las bodas celebradas en esta estación del año. ¡Porque
casarse en época invernal también tiene sus ventajas! Así que qué mejor que
acurrucarse bajo una manta, con una taza de chocolate caliente entre las manos
y leer algunas razones por la cuales planear vuestra boda de invierno…
Temporada baja y precios más asequibles
De sobras es sabido que los meses entre abril y septiembre son los más
solicitados para la celebración de bodas en nuestro país. Los proveedores saben
que los fines de semana de estos seis meses van a estar muy demandados y se
reservarán con facilidad, por esto es más probable que suban precios para hacer
su negocio más rentable. Las parejas que deciden casarse en invierno, no sólo
pueden contratar los servicios a precios más bajos, sino que seguramente pueden
contar con los proveedores que eligieron desde un principio y disponen de una
mayor flexibilidad en lo que a fechas se refiere. En lugar de tener que escoger
entre los días “sobrantes” que os ofrecen, lo más seguro es que podáis elegir
una fecha que sea especial para vosotros.
Navidad, una época del año con encanto
Planificar una boda navideña también tiene sus ventajas. Por ejemplo, no tendréis que romperos mucho la cabeza en cuanto a la decoración. Normalmente,
las iglesias ya están decoradas con hermosas flores durante las fiestas. Podéis
utilizar esto a vuestro favor y añadir sólo la decoración necesaria para darle
un toque más personal, o bien optar por plantas y arbustos invernales en lugar
de flores… La elección de
elementos y motivos estacionales y el uso de materiales fácilmente disponibles
os ayudarán a ahorrar dinero.También puede resultar divertido incorporar decoraciones
de temporada como detalles para los invitados.
Una boda diferente
Si tenéis claro que queréis algo distinto y que la vuestra no sea "una
boda de verano más", celebrar vuestro enlace en invierno le dará un
ambiente diferente. Podéis utilizar diferentes gamas de colores de rojos y
burdeos, verdes y dorados, incorporar copos de nieve, telas gruesas y pieles, utilizar la luz cálida de las velas…
Cread un ambiente acogedor y atractivo para vuestros invitados y seguro que hablarán
durante tiempo de lo original y única que fue vuestra boda.
Vía: Hostess with the Mostess / Brinton Studios / Happy Weds |
El clima
Puede que consideréis que el frío, la lluvia o incluso la nieve son inconvenientes
importantes si os casáis en invierno pero, ¿por qué no os lo planteáis desde
otro punto de vista? Escoged un sitio que os ofrezca diferentes espacios interiores
con una buena decoración. No tendréis que preocuparos por las altas
temperaturas (el sector masculino os lo agradecerá), ni estar pendientes de si
llueve o no el día de vuestra boda.
El vestido de novia
Las novias de invierno disponen de más opciones a
la hora de elegir su vestido. Pueden lucir un vestido con mangas y combinarlo
con un precioso bolero o abrigo de novia, e incluso unos guantes que le darán
un toque elegante y sofisticado.
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